La derrota menos dolorosa

Federico Ladrón de Guevara, goleador de Platense en la gran victoria de los Cadetes vs Vélez

No se puede todo en la vida… Hace dos semanas todo Platense Handball celebró como nunca la permanencia en la B. Ahora, en la semifinal de la C vs Vélez, el equipo iba por más, pero la racha ganadora se cortó, en lo que quizás es una de las derrotas menos amargas del año, porque el gran objetivo estaba cumplido y de ahora en más todo venía mucho más relajado.

Luego de las derrotas de Infantiles (38-13) y Menores (36-27), los Cadetes se enfrentaban con el equipo que los había derrotado por 8 goles en el Apertura y que había definido que Platense jugara el repechaje en este Torneo Clausura. Doloroso antecedente. A pesar de ello, los Cadetes salieron a jugar sin complejos en el primer tiempo, con un muy buen Mariano Ranalli en el arco, un impecable Julián Razetti Desde el extremo derecho, el goleo de Federico Ladrón de Guevara y la defensa de Tomás Otamendi. Con un 11-8 arriba en el marcador al cierre del primer tiempo, la etapa final comenzó con un trámite similar, pero, con el correr de los minutos, algunas exclusiones favorecieron la levantada de Vélez que, apoyado por su público, pasó al frente por 17-16. Se veía venir un final similar al del Apertura. Pero fue en ese momento cuando los cadetes sacaron a relucir el coraje que quizás les faltó en varios pasajes del año, pero que bien sabemos que lo tiene, como lo demostraron contra Larre hace dos semanas remontando 7 goles de desventaja, contra Afalp, contra Argentinos…

Y aparecieron Enzo Fuscaldo en el arco, con 3 atajadas mano a mano, la viveza y entendimiento de Roberto Lanziano y Federico y el impasable Tomás en la primera línea defensiva. El 21-18 se achicó a un solo gol de distancia en la jugada final, pero el recupero en defensa a falta de 5 segundos fue suficiente para que los Cadetes se desquitaran y consigueran el primer punto de la tarde.

Primer punto que, al fin y al cabo, resultó el único de la tarde, porque no sólo los Juniors cayeron, sino que, quizás sorpresivamente, los Juveniles, con alguna ausencia de peso, también perdieron en el partido final.

Los Juniors sólo mostraron algo de resistencia promediando el primer tiempo cuando achicaron la distancia inicial a sólo 3 goles, pero el juego en equipo no funcionó en la misma medida que las potencialidades de sus individualidades, y Vélez se encargó de facturar empecinadamente luego de cada pelota recuperada hasta cerrar en 35-24.

Más cerrado fue el partido de Juveniles, pero, al fin del día, Vélez fue el justo ganador por 25-21. Luego de un trámite parejo en el que Vélez estuvo siempre al frente, Platense logró recortar distancias hasta colocarse 21-19 arriba. En ese momento, Vélez le impuso marca personal a Matías López, el mejor jugador Calamar. Y ahí se acabó el partido para Platense: un parcial de 6-0 en esos 12 minutos finales depositó a Vélez en la final, mientras que Platense definirá por el tercer puesto con Larre.

En síntesis, una vez más, una derrota para seguir aprendiendo, con cosas positivas para extraer, pero que no duele tanto como si hubiera ocurrido en cualquier otro momento del año. Ahora con Larre nos espera el último partido del año y, con ello, la ilusión de terminar en victoria.